Rubén Antonio Jaime Salgado
En honor a la verdad, la generalidad de los sudcalifornianos sabemos muy poco de nuestros pueblos, de sus historias particulares, recursos, culturas, costumbres, tradiciones y leyendas, a menos que exista alguna circunstancia o algún motivo especial que nos permita ampliar la información que poseemos acerca de ellos. No obstante, reconocemos que allá, en aquellas comunidades, tan diversas e interesantes, localizadas en la parte austral de la más hermosa de todas las penínsulas del mundo, hay un tesoro de datos que desearíamos obtener, pero sin tantos tecnicismos, sin rebuscamientos y sin esos largos preámbulos que regularmente terminan por aburrirnos e inducirnos a interrumpir la lectura. Lo ideal para muchos es que, a la vieja usanza, algún lugareño o alguna persona originaria de esas localidades con dotes de buen narrador oral, nos quisiera sentar a su alrededor para relatarnos todo aquello que sabe de su tierra natal y que al mismo tiempo nos despejara las dudas que nos surgieran a lo largo de esas charlas. Sin embargo, esto último resulta cada día más difícil porque nuestras formas de vida han ido cambiando a través de los años y ya casi no nos damos el tiempo para detenernos a gozar de tales encuentros.
Aun así, no todo se ha perdido. Todavía hay quienes, como ahora lo hace Rubén Antonio Jaime Salgado –nativo de Todos Santos, Baja California Sur, con residencia en La Paz, capital del estado–, acceden a situarse en el centro del corrillo, para rendir un sentido homenaje a su pueblo querido, mediante la descripción de sus características; para hablarnos de su familia, de los recuerdos de su niñez y adolescencia, de las cocinas tradicionales, de las y los cocineros de antaño, y para aportarnos, en el último capítulo, a modo de exquisito corolario, su legado gastronómico, representado por un recetario de cocina que nos expone con ése, su estilo singular de experto conversador, siempre ameno y espontáneo. Distinguidas y distinguidos lectores: En términos generales, éste es el contenido del libro “Homenaje a Todos Santos y a su cocina tradicional”, que el autor ha querido publicar para ustedes, con el deseo de que repasen lo que ya saben de este pueblo sudpeninsular, de historia y tradiciones fecundas, extraordinario, bello y promisorio; asiento de gente trabajadora, creativa, perseverante y entusiasta; o bien, de que conozcan más de él, de su pasado, de su presente y de lo que su potencial promete para el futuro. En lo personal, me resta decirles que por Todos Santos he pasado infinidad de veces y en varias ocasiones he convivido en franca armonía con amigas y amigos todosanteños, usualmente bajo la sombra de arboledas frutales y entre jardines donde abundan las flores más radiantes que se producen en la entidad. Por ello creía conocerlo, pero al leer la obra de Rubén Jaime, descubro que anteriormente no sabía prácticamente nada de esta gema maravillosa del Pacífico, y que a partir de ahora, puedo decir con las pruebas en la mano, que el primero de nuestros pueblos mágicos sudcalifornianos… por todo lo que encierra y significa, es y seguirá siendo verdaderamente admirable.